Un nuevo tropiezo para Nole en el 2017, que amenaza con irse con las manos vacías este año. El jugador, que pasó de la gloria a la debacle, abandonó el Grand Slam de París luego de que Dominic Thiem lo doblegara en un partido para olvidar, ahora el vencedor tendrá que verse la cara este viernes con Rafael Nadal, el gran favorito de este torneo.

De nada valió la ayuda de Andre Agassi, pues el de Belgrado terminó cediendo en un partido que dejó paralizada a la crítica deportiva, pues muchos expertos aseguran que la actuación de Novak Djokovic sobre la arcilla fue tan errática, que por momentos transmitía la sensación de no saber exactamente qué hacer para conseguir un punto.

La debacle de Nole vino a propósito de la partida de Boris Becker, su antiguo entrenador. El alemán se retiró del equipo del ex número uno del mundo sumamente enojado, pues para él no podía ser concebible que existiera algo en la vida del jugador que estuviera por encima de su carrera deportiva. Al parecer se trata de la familia, pero se desconoce si existe algo más.

Andre Agassi, que fue en su momento una gloria del tenis, pero que no cuenta con muy buena reputación por su carácter voluble, accedió acompañarlo al Roland Garros, pero para los expertos en la materia no es un secreto que el de Las Vegas nunca ha sido entrenador de tenis y este acompañamiento estaba lejos de ser la solución para el serbio, que se despide de otro gran torneo con las manos vacías.