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Ramiro Helmeyer: Tips a la hora de instalar Arcos Detectores de Metales

El detector de metales en forma de arco se ha convertido por derecho propio en uno de los dispositivos de seguridad más usados en los controles de accesos a nivel mundial. Y es obvio, pues se trata de una herramienta de lo más útil a la hora de que nos aseguremos que a nuestros recintos no entren objetos indeseados y potencialmente peligrosos.

Ramiro Helmeyer, experto en seguridad y blindaje, habla al respecto en una publicación en su portal web oficial, y allí nos da una serie de recomendaciones a la hora de instalar estos simples pero a la vez muy funcionales dispositivos.

Lo primero que aconseja Helmeyer es que, para no dañar la tarjeta madre del equipo, hay que verificar que el mismo sea colocado justo en un lugar donde exista una correcta y perfectamente funcional instalación eléctrica, con sus contactos bien polarizados y con una tierra física lo suficientemente confiable.

Lo segundo es que, al tratarse de un dispositivo de metal relativamente grande y pesado, deberían ser entre (mínimo) dos personas las encargadas de armarlo e instalarlo. Personas expertas, por supuesto, y que sepan de antemano que ningún otro objeto de metal debe estar cerca (uno a tres metros) cuando se realice todo el proceso.

Otra cosa importante es que el terreno a instalar el detector de metales en forma de arco debe ser plano. Es un equipo robusto, sí. Es pesado, también. Pero solo en una superficie lisa funcionará sin posibilidades de presentar fallas debido a vibraciones que podrían generar lecturas alteradas.

Ramiro Helmeyer también recomienda saber muy bien qué se está instalando. ¿Por qué? Pues porque existe una gran cantidad de arcos detectores los cuales funcionan cumpliendo su labor en diferentes zonas específicas (2, 4, 6, 12, 16, 32 y más), a lo interno y a lo externo, con respaldo de energía, entre más.

El experto asegura que es recomendable hacer trabajar nuestro detector de metales en la mayor cantidad de zonas posibles (para una mejor lectura), y que hay verificar y ajustar bien las frecuencias de un arco cuando éste trabaje en una zona en conjunto con otros arcos similares para evitar inconvenientes.

Por último, Helmeyer recomienda un comodín, y no es otro que un detector manual portátil, ya que el mismo ayudará mucho a la hora de reconfirmar, esta vez más específicamente, las lecturas positivas realizadas por el detector de metales en forma de arco.