El mundo de la construcción ha tenido que adaptarse a las consecuencias en materia de nuevas necesidades para el hogar que se han generado luego de la crisis sanitaria de los últimos años

EC.- La pandemia del COVID-19 hizo que las necesidades y requisitos para comprar o construir una vivienda cambiaran para siempre pues, como explica Juan Francisco De Jesús Clerico Avendaño (presidente de VINCCLER), para estas estructuras ahora se demandan zonas de coworking, salas de meditación, zonas verdes y grandes balcones.

Expertos del sector en Latinoamérica han dicho que los confinamientos propiciaron la remodelación de pequeños espacios (y a la construcción de viviendas) que se ajusten más a las necesidades de una nueva generación de trabajadores que ahora requieren mayor funcionalidad y demandan diseños flexibles del interior de sus viviendas.

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Lo que ha surgido entonces es un fenómeno a través del cual se da una fusión del hogar, la oficina y el espacio social. Dicho de otro modo, la vivienda se convirtió en un espacio para hacer teletrabajo, deportes o educarse.

Las tendencias como el coworking, el coliving y el cohousing ya existían antes de la pandemia, pero en el presente han cobrado más relevancia. Eso ha obligado a las empresas de construcción y diseño de interiores a pensar en nuevos espacios, tanto de trabajo como de vivienda, porque ahora estas funciones van totalmente de la mano.

(Con información de VINCCLER)