La reactivación económica colombiana, y con los nuevos desafíos que pueden surgir el 2022, dependerá del trabajo conjunto que realicen las empresas privadas, públicas, el Gobierno Nacional y la comunidad en general, para mantener a flote y con buen desempeño el país.

Camilo Montes, director ejecutivo de la Cámara de Alimentos de la Andi, habló con La República sobre los planes que tiene la entidad y cómo a lo largo de este año han venido reuniendo esfuerzos importantes en tres frentes como la innovación, la nutrición infantil y el encadenamiento productivo.

Adicionalmente, explicó cómo desde la Andi están convencidos de que, si la industria en Colombia compra más y mejores materias primas locales, se podría mitigar los efectos de los costos internacionales, y en adición a esto, crear bienestar económico y social con mayor impacto en el agro colombiano.

¿Cuál es el rol de la industria en medio de la reactivación económica?

Desde la Cámara de Alimentos de la Andi se trabaja para contribuir en la reactivación económica de Colombia, adaptándonos a las coyunturas, abasteciendo a los colombianos y a los más de 120 países del mundo a los cuales exportamos. Desde este sector representado en 99,13% por micro, pequeñas y medianas empresas aseguraron durante 2021 más de 284.000 empleos formales y directos y de esta manera, promovemos el crecimiento sostenido de la economía colombiana.

Así mismo, las empresas de la industria de alimentos están realizando nuevas inversiones, por ejemplo, varios de los 63 grupos empresariales que tenemos afiliados, han hecho inversiones significativas para expandir el negocio, ser más eficientes, aumentar las plazas de empleo y tener mayor impacto en cada una de las comunidades a las que pertenecen.

¿Cómo promueve la industria el encadenamiento productivo?

Por cada empleo formal y directo en la industria de alimentos, se generan 7 empleos a lo largo de la cadena. En cada una de las etapas de esta cadena de valor, que comienza en las veredas y puertos de Colombia, pasando por miles de plantas de alimentos, centros de distribución y llegando a tiendas y supermercados, interviene el talento de miles de personas que están trabajando fuerte e incansablemente para garantizar el abastecimiento del país.

Las empresas afiliadas y no afiliadas a la Cámara para generar relaciones de confianza con el sector agrícola, pecuaria y pesquera y de esta manera permitir que el encadenamiento productivo sea efectivo y apoyamos programas como Agricultura por Contrato del Ministerio de Agricultura, Desarrollo de Proveedores de MinComercio y Colombia Productiva o estrategias de Competitividad Inclusiva de la Fundación ANDI.

¿Cómo se aporta en la capacidad de producción del sector agrícola?

En un trabajo articulado con el ecosistema empresarial colombiano, donde nuestros afiliados compran materias primas de origen agrícola o pecuario que respondan a las necesidades nutricionales de los colombianos. Por ejemplo, desde la Cámara de Alimentos de la Andi buscamos que se fortalezcan las relaciones de confianza entre la industria de alimentos y los campesinos y por eso, trabajamos en el programa “Coseche y Venda a la Fija”, que busca que antes de que el campesino cultive, tenga claro a quién va a vender.

De esta forma, el campesino gana porque tiene certeza de que todo el proceso de producción de alimentos frescos va a tener un buen punto de llegada, y además la industria se beneficia porque garantiza el abastecimiento de esa materia prima para que se puedan desarrollar alimentos con valor agregado. Adicionalmente, contamos con una estrategia de competitividad ejecutada con el apoyo de la Fundación ANDI, la cual, busca garantizar la compra de esa materia prima e interviene en las comunidades para fortalecer sus capacidades de gestión empresarial en el desarrollo de negocios.

¿Cuáles son los alimentos que desde la industria consideran de mayor valor agregado?

Cada una de las más de 15 categoría de la industria de alimentos tiene una alta capacidad de generar valor agregado cuando alimentamos a Colombia y el mundo. Para ir a ejemplos puntuales: Colombia cuenta con una producción completa en chocolatería, dado que aquí se concentra tanto la producción de cacao desde las veredas y zonas de conflicto, como las marcas con alto reconocimiento en el mercado nacional e internacional.

Como país, también nos destacamos en la exportación galletería y aceites a los países cercanos y en confitería a varias regiones del mundo, somos uno de los principales productores de bombones o chupetas. Por eso debemos aprovechar las oportunidades que tenemos de alimentar no solo a los colombianos sino también al mundo, teniendo presente nuestro aporte sobre de la seguridad alimentaria y la reactivación económica.

¿Cuáles son las apuestas del sector para el año 2022?

Los altos niveles de desempleo e informalidad en el mercado laboral, el incremento a nivel global del precio de las materias primas, sumados a la presión que genera la inflación, nos llevan a un principal desafío: mejorar la capacidad de gasto en los hogares colombianos.

Por eso, con el objetivo de contribuir a la reactivación económica desplegamos apuestas importantes para ampliar la capacidad del país: es fundamental acelerar las inversiones en el sector, promover las capacidades en ciencia y tecnología que permita mejorar las capacidades de innovación en Colombia de tal forma que se pueda fortalecer la producción de alimentos con valor agregado en Colombia.