El Gran Premio de Mónaco estaba en la bolsa del corredor inglés desde el comienzo de la competencia, pero un insólito error de cálculo en el equipo de la Mercedes Benz le costó la victoria a Hamilton, que tuvo que decirle adiós a la copa a sólo 15 vueltas de finalizar una competencia que se tornaba, por momentos, aburrida.

Lewis Hamilton, acostumbrado a descollar con Mercedes Benz, lideraba la competencia seguido de Nico Rosberg y de Sebastián Vettel, los dos pilotos que se han convertido en sus eternos perseguidores en lo que va de campeonato. Tras un accidente de Verstappen, el equipo de Mercedes decidió enviar a Hamilton a un segundo cambio de ruedas y esto dio un vuelco inesperado a la competencia.

El equipo calculó que la distancia que tenía Hamilton de sus competidores era tal, que una parada no perjudicaría su lugar en la competencia, pero cometieron un garrafal error. Tanto Rosberg como Vettel siguieron adelante aprovechando la temporal ausencia del inglés y tomaron, respectivamente, la primera y la segunda posición en Mónaco, una movida que desplomó las apuestas.

El automovilista inglés no podía ocultar su enorme enojo y consternación cuando llegó hasta la bandera a cuadros en la tercera posición. Con esta sorpresiva victoria, Rosberg se suma su segundo triunfo consecutivo en el campeonato de Fórmula 1 de este año. Aún Hamilton lidera la competencia de pilotos, pero ahora su compañero de equipo se acerca a él, con sólo 10 puntos de diferencia.