Motorola y Nokia son algunas de las marcas que se han preocupado en el lanzamiento de teléfonos inteligentes de gama baja, pensando en los países que atraviesan severas crisis financieras o en los mercados emergentes. HTC, además de presentar hace poco un smartphone que ya es considerado por muchos como uno de los mejores del mercado actual, también ha puesto en el mercado su contraparte económica el HTC Desire 310.
Sony Xperia E1 es también una alternativa bastante razonable en cuanto a precios y características. Dotado con Android Jelly Bean y con una memoria RAM de 512MB, posee una cámara bastante modesta de 3 megapíxeles en la parte posterior del dispositivo y de 0.3 en la cara frontal. Sus prestaciones son bastante modestas si se lo compara con el Xperia Z2, que además permite grabar videos en definición 4K.
HTC Desire 310 supera el precio del modelo de Sony, pero a su vez también tiene características nada desdeñables, como una cámara de 5 megapíxeles, así como una batería más duradera. El modelo de la empresa nipona así como el de la compañía tecnológica china, ofrecen tecnología Dual-Sim.
Samsung ha optado últimamente por reforzar su presencia en mercados donde ya sus dispositivos de gama alta hablan por sí mismos de su rendimiento y durabilidad, y ni hablar de la política de mercadeo de Apple, que parece cerrar sus círculos sobre el mismo grupo de consumidores que sólo renuevan sus equipos, en un afán de ser eternamente fieles a la marca. Nokia y Motorola se han propuesto nuevos horizontes.
Nokia con sus modelos 220, la línea Asha y su Nokia X, pasa desapercibido si se lo compara con las nuevas características del Galaxy S5 y su fulgurante pantalla AMOLED, pero en un segmento de nuevos y modestos consumidores que desean establecer un primer contacto con los smartphones sin que eso suponga un gasto descabellado, la empresa finlandesa y HTC pueden marcar la diferencia.
