Puede que al principio le parezca extremista y hasta injusto que le diga «psicópata» a su jefe, también es probable que hasta le parezca una persona carismática, responsable y colaboradora, muy eficiente en su trabajo. Con este perfil, ¿quién sospecharía que alguien así podría padecer este trastorno? Es bastante probable que nadie, pero precisamente estas virtudes son algunos de los síntomas de un psicópata.
Según Wikipedia, la psicopatía es un trastorno de personalidad antisocial. Para ser un psicópata no necesariamente se tiene que haber matado a alguien o haber cometido algún delito grave. El periodista y escritor Jon Ronson, autor del libro «A Psychopath Test» (El test del psicópata), señala que en el mundo de los negocios y en el ámbito corporativo es bastante frecuente encontrar psicópatas.
Estos psicópatas parecen completamente normales y pueden pasar desapercibidos. Se trata de personas que son encantadoras superficialmente, tienen una alta autoestima, son inteligentes, tienen mucho liderazgo, creen que pueden con todo, mienten con mucha facilidad, no sienten ningún tipo de remordimiento, de comportamiento frío, desconsiderado y despectivo. Su cariño por la gente suele no tener mucha profundidad y sólo ayudan o colaboran cuando eso les genera algún beneficio. Son incapaces de sentir empatía por el otro, sus sentimientos y sus necesidades. Además de eso, son muy irritables, impacientes y son personas impulsivas.
«Y destilan una malevolencia casi invisible, especialmente si son líderes empresariales. Pueden afectar al Capitalismo. Y creo que eso fue lo que vimos con la crisis bancaria: es capitalismo moldeado por una especie de psicopatía. Es extraordinario que los psicópatas puedan tener tanto poder, que puedan moldear toda una sociedad», le dijo Ronson a BBC Mundo.
Robert Hare, profesor de Psicología, y el doctor Paul Babiak, psicólogo industrial y organizacional, ya habían trabajado sobre este tema y decidieron llamarles «Serpientes con trajes» a estos empresarios y talentosos trabajadores. En investigaciones y trabajos anteriores, mediante la aplicación de la Escala de Calificación de Psicopatía de Hare, Babiak encontró que mientras mejor era la opinión de la empresa con respecto al empleado, más posibilidades había de que esta persona fue psicópata.
Precisamente esa incapacidad de empatizar con los demás y de hacer sólo lo que le genere algo a cambio es lo que hace que puedan pasar por encima de los demás y abrirse paso hasta conseguir lo que quieren. Se trata de la misma característica de esos psicópatas que matan y hacen daño sin ninguna consideración, viendo a las personas como si fueran objetos que les permiten llegar hacia un fin.
De acuerdo con el artículo de la BBC, Ronson concluye que los psicópatas «integrados» existen y son un grupo poderoso, «el capitalismo en su expresión más despiadada es una manifestación de psicopatía». «…Todos podemos ser fríos y duros, inhumanos, como los psicópatas», le explicó a BBC Mundo.
Fuente: BBC Mundo
