El juego del martes entre el Japan Breeze y Cardenales de Lara de Venezuela, fue la primera vez que Jesús Vargas (lanzador abridor) y Alí Sánchez (receptor) hacían batería.
Sin embargo, parecía que llevaban tiempo trabajando juntos, pues la comunión fue tal que el iniciador del conjunto criollo enarboló un no-hitter e inscribió su nombre, el de Cardenales y toda Venezuela en los libros de historia de la Serie del Caribe.
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«Todo el crédito (es) para Jesús (Vargas), tuvimos una muy buena comunicación. Era la primera vez que le recibía y sólo le dije que utilizara sus fortalezas», dijo el receptor barquisimetano en rueda de prensa después del partido. «No había ningún reporte de los bateadores japoneses, (pero) ejecutó muy bien el sinker, que combinamos con el slider y el cambio».
Al igual que todo Cardenales, Alí Sánchez arrancó lento. De hecho apenas tiene solo tres hits en 12 turnos (.260) y no fue parte del juego ante México. Sin embargo, después del descanso, hizo un buen trabajo detrás del plato ante Puerto Rico y lo confirmó con creces al enarbolar este espectacular trabajo junto a Jesús Vargas.
Cabe destacar que, si bien la experiencia no es nueva para el careta de los ‘pájaros rojos’, lo demás no se compara con el hecho de haber recibido un sin hits en una Serie del Caribe.
«Es el tercer no-hitter que recibo. Uno fue en categoría de Novatos y el otro en Doble A, pero ninguno como este», confesó Sánchez, que mascoteó 86 pitcheos del serpentinero guaireño (55 en zona de strike), que además retiró a 16 de los 17 últimos oponentes que enfrentó y cerró su faena con tres ponches.
