El abridor criollo de los Navegantes del Magallanes, Junior Guerra, está viviendo un segundo aire en su carrera en la LVBP. Tal ha sido la impronta que ha dejado en esta 2024-25, que es un fuerte candidato para hacerse con diversas distinciones.
El martes se apuntó su séptima victoria de la zafra (7-1), para seguirse consolidando como uno de los mejores jugadores en el corriente. Encabeza a los serpentineros calificados en efectividad (2.00), WHIP (1.17), FIP (3.22). Y, ese liderato en juegos ganados y segundo lugar en ponches (38) lo hace coquetear con la Triple Corona de pitcheo, misma que obtuvo Osmer Morales en la 2023-24, al encabezar al circuito en triunfos (7-0), promedio de carreras limpias (2.26) y guillotinados (51).
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De igual modo, Junior Guerra es primero en entradas lanzadas (54.0) y su BABIP de .270 es también el más bajo entre los escopeteros acreditados del circuito. Ello, junto a su FIP y su tasa de boletos por cada nueve innings de 2.83 -la cuarta mejor de la LVBP entre los calificados-, nos habla de un serpentinero que ha sido dominante, con mucho aplomo y capacidad para limitar a los bateadores rivales.
Un caso también para Regreso del Año
Pero sus paralelismos con Osmer no terminan ahí. También es un caso para el Regreso del Año. Y es que estamos hablando de un lanzador que apenas realizó cuatro aperturas en cada una de sus dos campañas previas a esta. Adicionalmente, se sometió a la cirugía Tommy John y ya totalmente recuperado está gozando de un año con una considerable carga de trabajo.