Pese a no jugar el jueves ante los Nacionales de Washington, el venezolano Luis Arráez fue la nota divertida del juego sin hits ni carreras de su compañero Dylan Cease, luego de la línea de C.J. Abrams que terminó en el guante de Bryce Johnson en el jardín derecho y selló el triunfo 3-0.

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El criollo le entregó al ahora histórico abridor diestro la bola del out 27, pero, ¿Qué significado tan especial tuvo este gesto? ¿Por qué Luis Arráez? Y es que en septiembre de 2022 fue precisamente el yaracuyano quién privó a Cease de lograr la hazaña, cuando este aún pertenecía a los Medias Blancas de Chicago y “La Regadera” perseguía su primer título de bateo con los Mellizos de Minnesota.

En aquel entonces Arráez conectó sencillo hacia la pradera derecha cuando habían dos outs en el noveno inning. A Cease no le quedó de otra que agachar la cabeza y poner las manos en las rodillas en señal de resignación. “Todos en Chicago me odiaban”, añadió el dos veces champion bat.

Sin embargo, la historia fue diferente el jueves, con el venezolano observando al derecho de 28 años hacer historia al convertirse apenas en el segundo serpentinero de los Padres en enarbolar un ‘no-no’. A él lógicamente le sorprendió y le agradó el gesto del venezolano.

“Ahora es mi compañero de equipo. Disfruté viendo cómo lanzó hoy”, destacó el camarero.

Arráez sabía que era capaz

Hace unos días compartieron un ascensor y hablaron al respecto de ese episodio de 2022. Arráez; como todo un campeón bate, lo motivó a hacerlo, creyó en él. “Le dije, ‘tú tienes buenos pitcheos, puedes lograrlo’. Y mira, hoy lo hizo. Estoy realmente emocionado por él”.

No obstante, Arráez confiaba en que Cease pudiera lograrlo. Y es que había estado cerca en sus últimas dos aperturas, permitiendo solo un hit en cada una. Además se convirtió en el primer pitcher desde al menos 1901 en registrar 30 ponches y recibir dos hits o menos en un período de tres salidas.

“He estado cerca”, apuntó el diestro. “Y finalmente lograrlo es una de esas cosas que se siente tan bien y es difícil de creer. Poder hacerlo — salir y experimentarlo — realmente no sé ni cómo sentirme. Solo estoy feliz”.