A la princesa del Pop, Britney Spears, le otorgaron una orden de restricción que solicitó para su ex manager, Sam Lutfi, donde dictamina que el mencionado no podrá acercarse a ella a menos de 182 metros, así como deberá evitar dar declaraciones despectivas sobre la cantante.
Lutfi asegura que desde el año 2009 no tiene contacto alguno con Spears, pero que sin embargo, recientemente se habría comunicado con la mamá de la artista, Lynne, para ofrecerle su ayuda financiera para desafiar la curaduría de su hija que actualmente la tiene el padre, Jamie Spears, aunque insiste en que no se trataba de un soborno.
En los documentos a los cuales tuvo acceso un medio de comunicación, señala que Lutfi argumentó que Spears realizó comentarios negativos sobre él en un reciente video que subió a su red social de Instagram.
