Antes de retomar nuestro repaso por lo que ha sido la historia de los venezolanos en las Grandes Ligas, hablemos del All Star Game 2025 y su guiño a “El Gato” Andrés Galarraga, que fue homenajeado en el Truist Park junto al inmortal Chipper Jones y Andruw Jones. El venezolano solo jugó un par de años en Atlanta, entre 1998 y el 2000, pero es recordado con cariño por la afición de los Bravos, especialmente por el temple que tuvo para volver tras su lucha contra el cáncer. Toda esa admiración que despertó entonces sigue intacta hoy día.
“Es un honor, una felicidad muy grande, esta franquicia me trae muy buenos recuerdos… Regresar en el 2000 e ir al Juego de Estrellas me hizo muy feliz, volver ahora me llena de orgullo. No hay palabras para describir la emoción que siente”, dijo el caraqueño, en una de las tantas entrevistas que ofreció en la previa del clásico de mitad de temporada. Se le veía conmovido, recordando esa etapa de su vida, en la que quizás muchos pudieron pensar que su carrera había llegado a su fin y se sorprendieron al verlo, no solo volver, sino mantenerse siete campanas más.
El momento definitivamente fue especial, un viaje en el tiempo. Y es que el Juego de las Estrellas estaba regresando a Atlanta luego de 25 años, porque sí, el último fue el del 2000 en el que coincidieron Galarraga, Andruw y Chipper Jones. Para “El Gato”, que entonces se acercaba a los 40, fue el último clásico de su carrera, pero para el jovencito Andruw Jones -de tan solo 23 años- era el primero y para Chipper sería el cuarto de los ocho con los que se retiraría. Volver a Atlanta y tenerlo a los tres fue poesía, el comienzo ideal para un espectáculo que enalteció de muchas formas la historia de la franquicia.
Y, claro, para nosotros los venezolanos una oportunidad ideal para volver a hablar de Andrés. Ese imponente primera base que nos regaló una carrera impecable de 19 años en Grandes Ligas, en la que jugó también con Expos de Montreal (8 años), Rockies de Colorado (5), Gigantes de San Francisco (2), Cardenales de San Luis, Rangers de Texas y Angelinos de Los Ángeles (1). Ganó dos Guantes de Oro (1989 y 1990), dos Bates de Plata (1998 y 1996) y un título de bateo (el de 1993, cuando ligó para .370). Pero además estuvo, al menos cuatro veces, en el top 10 de los más votados para el premio MVP. Hizo parte, entre 1995 y 1997, de los Bombarderos de la calle Blake junto a Ellis Burks, Dante Bichette, Larry Walker, y Vinny Castilla. Un grupo que en conjunto conectó -durante esos tres años- 517 jonrones, siendo Galarraga el que más aportó con 119.
Hablando su poder, se le recuerda mucho por sus 399 jonrones, que hoy por hoy lo mantienen como el segundo venezolano con más jonrones en Grandes Ligas, solo por detrás de Miguel Cabrera (511). Pero es que también es segundo en carreras impulsadas (1425) y está en el Top 5 de los que han conectado más hits (2333) y más dobles (444). Su promedio vitalicio es de .288 y su OPS de .846.