El AC Milan pagó caro la expulsión de Theo Hernández por simular una falta y el Feyenoord, propulsado por un letal cabezazo del argentino Julián Carranza, avanzó el martes a los octavos de final de la Liga de Campeones a expensas del otrora campeón europeo al sacar un empate 1-1 en el partido de vuelta de su eliminatoria.
Bayern Múnich, Brujas y Benfica ganaron también sus series el martes, al dar cuenta respectivamente de Celtic, Atalanta y Mónaco.
Hernández recibió su segunda tarjeta amarilla del partido por un piscinazo a los 51 minutos, justo cuando el Milan dominaba tras el gol del delantero mexicano Santiago Giménez en el primer minuto — uno que había igualado la eliminatoria contra su antiguo equipo.
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“En el fútbol todo cambia en un segundo”, comentó Giménez, autor de uno de los goles más rápidos de la competición al marcar al cabo de 40 segundos.
AP