Ha sido tan habitual ver a Rangel Ravelo en la LVBP, que ya para Cardenales de Lara es un criollo más, no solo por el tiempo que tiene copando la importación de los ‘pájaros rojos’, sino por toda la producción que ha desplegado en estas latitudes.
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Ahora bien, este miércoles en la victoria de los crepusculares 5-2 sobre Tiburones de La Guaira en Macuto, empalmó su cuarto cuadrangular de la campaña. Un batazo clave para el desenlace del compromiso, al representar las dos carreras del empate en el sexto.
«Venía lanzando un juegazo», dijo Ravelo a ByM Sport en referencia a su compatriota Miguel Romero; quien fue el abridor de los escualos, y ante quien precisamente dio la conexión. «Me vino con su sinker, pegado, y traté de no poner el bate adelante y salió el batazo».
Ese, además fue su 30mo estacazo de por vida en la LVBP, lo que lo convierte; de acuerdo al historiador y periodista Tony Flores, en el 14to importado en alcanzar dicha cifra. Igualmente, llegó a 161 carreras impulsadas y actualmente está a 12 inatrapables de llegar a los 300 en su paso por el circuito.
No obstante, el oriundo de La Habana tiene seis juegos consecutivos conectando al menos un indiscutible. En ese tramo en el que acumula 12 fletadas y promedio de .500 (de 20-10) con un doble, dos estacazos y 17 bases alcanzadas.
Dicho eso, Ravelo es colíder de Cardenales en vuelacercas (4), primero en producidas (25). Adicionalmente, es segundo entre los paleadores calificados del equipo en promedio (.303), primero en porcentaje de embasado (.441), segundo en Slugging (.472). También es primero en OPS (.913).
