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Luis Aparicio asombró al mundo, porque resucitó el robo de bases

Ningún venezolano había aparecido en la Serie Mundial, y ya se habían jugado 55. Era el 22 de septiembre de 1959, hace ahora exactamente 65 años, de cuando se titularon los Medias Blancas campeones de la Liga Americana, con Luis Aparicio, de 25 años, en el shortstop, capitán del equipo y líder de una velocidad que obligó a bautizarlos “Los Go Go Sox”.

Acumularon 113 bases robadas en la campaña. Y las 56 de Aparicio fueron superiores a la suma de las logradas por los otros 15 equipos, de las dos Ligas.

Desde su llegada a las Mayores, en 1956, Luis fue líder en bases robadas nueve años seguidos. Robó 56 en 1959 y 57 en 1964. Terminó su carrera con 596 robos.

Durante esa tarde de aquel septiembre, jugaban los Indios en el Comiskey Park, y en la primera entrada del noveno inning, con un out y hombre en primera, el puertorriqueño, Víctor Pellot Power, conectó roletazo por segunda base, que se convirtió en double play, de Nelly Fox a Aparicio a Ted Kluszewski. Final 4-2… ¡Medias Blancas campeones!
Les faltaban siete juegos del calendario, pero ya estaban titulados.

Este club del sur de Chicago, no ganaba una Serie Mundial desde 1917. Y hacía 40 años de la debacle de 1919, cuando ocho de ellos, a quienes llamaron entonces Medias Negras, se vendieron a los apostadores. Los Rojos les ganaron la Serie.

Y en ese octubre de 1959, también perdieron ante los Dodgers, en seis juegos, con los lanzadores y el receptor John Roseboro, en labor notable, porque permitieron solo dos robos, mientras los Dodgers robaban cinco bases… O sea, los Go-Go Dodgers.
Después del último juego de la serie, Aparicio estaba en el clubhouse, rodeado de reporteros, y uno le pidió explicara lo de la poca actividad en las bases.

“Si no nos embasábamos no podíamos robar. Los Dodgers lograron tremendo pitcheo, con Sandy Koufax, Don Drysdale, Larry Sherry y Johnny Podres.

Pero ha sido una buena Serie Mundial. No la ganamos, pero jugamos lo mejor que pudimos. Espero que esta experiencia nos sirva en el futuro. Lo necesitamos”.

Aparicio le conectó doble al estelar zurdo Sandy Koufax en el quinto juego del campeonato y en toda la Serie Mu7ndial bateó para 308 y robó una de las dos bases por Chicago.

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