Blake Snell fue el protagonista en el encuentro de este miércoles entre Phillies de Philadelphia y Los Dodgers de Los Ángeles, el experimentado lanzador firmó su mejor salida de la temporada y guió la victoria 5-0, evitando así la barrida en la serie de tres compromisos.
Snell dominó el encuentro y trabajó durante siete entradas impecables, sin permitir carreras y recetando 12 ponches, la cifra más alta que ha conseguido en lo que va del año.
El respaldo ofensivo no faltó: Freddie Freeman y Shohei Ohtani la sacaron del parque, mientras que Ben Rortvedt y Kiké Hernández también sumaron cuadrangulares para asegurar el triunfo.
El momento más tenso llegó en el séptimo episodio. Snell ya acumulaba 107 lanzamientos, su mayor esfuerzo de la campaña, y había dado pasaporte a los dos bateadores anteriores.
El mánager Dave Roberts salió al montículo con la duda de si darle la bola al relevista Alex Vesia para conseguir el último out. Sin embargo, tras un breve cruce de palabras, confió en su abridor.
El resultado fue inmediato, dominó su lanzamiento para que Otto Kemp abanicara y Snell celebró con euforia su precisión.
Al final del encuentro, el propio Snell explicó lo que sintió en ese instante: «Estaba emocionado. No me gusta que el bullpen termine mis entradas. Soy muy firme en eso. No quiero que estén en esa situación. Me metí en esto y puedo lanzar para salir de esto».
Para finalizar su rueda de prensa el serpentinero aseguró que: «Me sentí firme en los lanzamientos esta noche».
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Snell acumula dos salidas consecutivas con doble dígito en ponches, además es la quinta vez en su carrera que logra al menos 11 en partidos seguidos, un registro que llegó a extender a tres juegos durante 2023.
Desde que volvió de la lista de lesionados, ha mantenido una efectividad de 2.53 en ocho presentaciones.
