El primera base de los Dodgers de Los Ángeles, Freddie Freeman, activó las alarmas dentro de la organización tras abandonar el partido en la sexta entrada por un golpe que recibió en la muñeca izquierda.
Este hecho ocurrió en la derrota 5-6 de su equipo ante los Cerveceros de Milwaukee, donde recibió un pelotazo de 88 mph que se terminó desviando y lo golpeó mientras intentaba hacer un swing.
El manager Dave Roberts dijo a diversos medios de comunicación que Freeman será evaluado día a día debido a la contusión que presentó y esperan que no sufra una lesión de gravedad.
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«Contuve la respiración. Creo que todos lo hicimos porque, ya sabes, cuando estás luchando y potencialmente puedes perder a un jugador por cuatro a seis semanas, es obviamente muy aterrador», dijo.
«Pero, ya sabes, exhalamos, suspiramos de alivio después de escuchar que la radiografía fue negativa», agregó el estratega en sus declaraciones.
Freeman sufrió una lesión en la muñeca izquierda en el año 2017 después de ser golpeado en un partido por los Bravos de Atlanta, por lo que el equipo está alerta a su recuperación.
«Él simplemente no sale de los juegos. Y entonces no sabía por qué caminaba hacia mí. Luego, al escucharlo decir que era su muñeca y que no podía continuar, sí, realmente me preocupé», concluyó.
