El juego comenzó con un dominio claro de los Timberwolves, quienes lograron una ventaja temprana gracias a las destacadas actuaciones de Rob Dillingham y Oso Ighodaro.

Dillingham, con 23 puntos y 7 asistencias, fue clave en la ofensiva de Minnesota, mientras que Ighodaro aportó 17 puntos y una sólida presencia en la pintura.

Los Phoenix Suns, liderados por Bayron Ellis con 23 puntos, intentaron mantenerse en el partido, pero la consistencia y la defensa de los Timberwolves les permitieron mantener una ventaja durante la mayor parte del encuentro.

A pesar de los esfuerzos de Ellis y L. Miller, quien anotó 22 puntos, los Suns no lograron remontar el marcador.

El tercer cuarto fue especialmente intenso, con ambos equipos intercambiando canastas y manteniendo la emoción hasta el final. Sin embargo, fue en el último cuarto donde los lobos  lograron consolidar su ventaja, gracias a una defensa sólida y ataques efectivos.

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Con esta victoria, los Minnesota Timberwolves demuestran su potencial y se posicionan como un equipo a seguir en la NBA Summer League. Por otro lado, los Phoenix Suns tendrán que revisar su estrategia y mejorar su defensa para futuros encuentros.