El Barcelona igualó al Real Madrid en la cima de la clasificación de la Liga española al golear 8-2 al Huesca bajo el mando de un inspirado Lionel Messi, autor de dos goles.

Después de tres jornadas disputadas, sólo blancos y azulgranas cuentan sus partidos por victorias. Como el Madrid, el Barcelona también se benefició de un calendario benigno y no tuvo problemas en demoler al recién ascendido Huesca. Los azulgranas son líderes por mejor diferencia de goles: dos más, que los merengue.

La primera parte fue atractiva porque Huesca mostró atrevimiento e incluso se adelantó a los dos minutos con un gol de “Cuchu” Hernández aprovechando un fallo defensivo.

El tanto enfureció a Messi, que asumió el mando del Barcelona y a los 16 minutos igualó en una brillante jugada personal. Y a los 24 minutos el conjunto azulgrana volteó el marcador con un autogol de Pulido.

El Barcelona comenzó a disfrutar de su estilo de juego y Luis Suárez marcó a los 40 minutos su primer gol de la temporada -al final haría otro-, aunque el Huesca sugirió algo de emoción dos minutos más tarde con un tanto de Gallar.

Sin embargo, el conjunto entrenado por Leo Franco dimitió en la segunda parte, en la que hizo múltiples e inconcebibles concesiones. Como en el cuarto gol, obra de Ousmane Dembélé con un disparo cruzado.

Ivan Rakitic hizo el quinto a los 52 minutos con un disparo lleno de talento y Messi completó su doblete a los 61. Ter Stegen sacó de portería con la mano, Coutinho sirvió profundo para Messi quien superó a Axel Werner en un sencillo mano a mano.

El Barcelona añadió otra muesca a su amplia goleada con un gol de Jordi Alba con precisa asistencia de Messi. El lateral se reivindicó en una semana muy dura tras conocer su ausencia de la convocatoria con la selección española. Y el equipo de Valverde cerró la fiesta anotadora con un penal marcado por Suárez en el descuento.

Así concluyó un día más en la oficina del Barcelona, que jugó y goleó a placer ante un rival inexistente en la segunda parte.