Samsung dejó claro con cifras contundentes que su dominio a nivel tecnológico parece estar presente en todas las áreas. La empresa surcoreana no sólo representa a la mayor parte de la población mundial que hace uso de smartphones, sino que además ha dejado buenas bases en el sector de las tablets, de las computadoras portátiles y de los teléfonos inteligentes.

Galaxy Gear es, hasta la fecha, el único producto de Samsung que no ha logrado calar en el mercado y esto demuestra que tal vez la población no está lista para la llegada de un smartwatch. Esto, podría representar malas noticias para la empresa de Cupertino.

Apple, a la muerte de Steve Jobs, ha manejado una dinámica más bien pasiva, concentrándose sólo en establecer mejoras (a veces tímidas) de sus productos ya existentes, pero sin presentar ante el mercado ninguna oferta innovadora.

iWatch, que viene comentándose desde mediados del año pasado, podría ser el único lanzamiento atractivo de la empresa norteamericana para este año en un segmento tecnológico que aún se muestra renuente, prueba de eso la indiferencia ante los wearables como los Google Glass y los Galaxy Gear.

iPhone es el caballo de batalla de Apple en estos momentos, sustituyendo la fuerza económica del iPod como reproductor mp3 innovador. Lo que los analistas cuestionan en el iPhone es su precio y sus mínimas variaciones.

La empresa de Tim Cook se está quedando sin posibles compradores para su smartphone, pues aquellos que ya tienen uno sólo compran el siguiente para estar actualizados, pero… ¿qué sucede con los nuevos usuarios? ¿a dónde se están yendo o bajo qué marca están permaneciendo? Muchos aseguran que tras la caída de pioneros como Blackberry y Nokia, la mejor opción es la familia Galaxy de Samsung.

iPhone 5C fue un intento fallido de poner al alcance de todos un equipo potente, pero económico. La oferta de Apple fue débil y los usuarios no se sintieron seducidos por un equipo de plástico que seguía en los anaqueles a un precio descabellado.

Moto G y Nokia X son claros ejemplos de los smartphones que están calando en el mercado tecnológico actual: equipos de calidad comprobada con precios que no superan los 200 dólares. Ante competidores así, no es de extrañar que el futuro de Apple preocupe a muchos.