Este lunes se llevó a cabo en Mónaco una nueva edición de los Premios Laureus, los cuales se encargan de reconocer a los mejores deportistas de, en este caso, el recién culminado año 2018. Los grandes ganadores de la noche resultaron el tenista serbio Novak Djokovic y la gimnasta estadounidense Simone Biles.
En el caso de Djokovic, esta es la cuarta ocasión que recibe este premio, igualando el récord del atleta jamaicano Usain Bolt… y lo recibió porque, tras retornar a las canchas después de una lesión de codo, fue capaz de ganar, entre otros títulos, Wimbledon y el US Open, además de recuperar el número uno del tenis mundial.
“Ganar un Premio Laureus es lo que desea todo deportista y es un gran honor para mí. Estar rodeado de grandes deportistas esta noche da un significado especial a este galardón”, declaró el serbio, que se impuso en las votaciones al futbolista francés Kylian Mbappé, al atleta keniano Eliud Kipchoge, y al baloncestista estadounidense LeBron James.
Biles, por su lado, ganó en la categoría femenina, y lo hizo al hacerse de cuatro medallas de oro, una de plata y una de bronce en el pasado Mundial de Gimnasia. Además, con apenas 21 años, se convirtió en la primera gimnasta en ganar cuatro títulos mundiales en el concurso general individual.
La estadounidense, que también tiene el récord de títulos mundiales (con 14) en diferentes disciplinas, ya había ganado el Laureus en 2017. En esta oportunidad superó en las votaciones a las tenistas Simona Halep y Angelique Kerber, las esquiadoras Ester Ledecka y Mikaela Shiffrin, y a la triatleta suiza Daniela Ryf.
En el resto de las categorías los laureados fueron los siguientes: la selección francesa de fútbol como el mejor equipo, la tenista japonesa Naomi Osaka como la mayor revelación del año, el golfista estadounidense Tiger Woods como la mejor reaparición, la esquiadora estadounidense Chloe Kim como la mejor deportista de acción, y la también esquiadora eslovaca Henrieta Farkasova como la mejor deportista paralímpico.
Los Laureus también distinguieron al entrenador francés Arsene Wenger por toda su trayectoria, al atleta keniano Eliud Kipchoge por el mayor logro del año (el récord del maratón), la esquiadora norteamericana Lindsey Vonn el Laureus al Espíritu del Deporte y la Organización YUWA, que trabaja por mejorar a través del fútbol las condiciones de las niñas en la región rural de Jharkhand (norte de India) el Laureus Sport for Good.
