La marca Trump es una de las más influyentes del mundo, sin duda alguna. Sin embargo, esta marca anda en horas muy bajas (en Europa por lo menos).
Un estudio llevado a cabo en los Estados Unidos por la Asociación Americana de Agencias de Publicidad (4A’s) y la empresa de investigación de mercados SSRS, el 38% de los estadounidenses creen que la marca Trump ha sufrido el impacto negativo de las controvertidas “opiniones y acciones” de Donald Trump, actual presidente de Estados Unidos.
Sólo un 9% de los casi mil estadounidenses que fueron encuestados en el informe por 4A’s y SSRS afirma que la marca Trump (que se basa en una gran cantidad de negocios inmobiliarios a corbatas, y hasta restaurantes) es “más lujosa” desde que se transformó en el presidente de Estados Unidos hace algunos meses.
Sin embargo, la apreciación de las falencias de la marca Trump varía notablemente en función de la orientación política de los consultados. 58% de los demócratas y 44% de los independientes creen ciegamente que la marca Trump ha perdido fuerza en los últimos meses por culpa de la llegada de Donald Trump –y sus decisiones radicales y controversiales- a la Casa Blanca. Por otra parte, el 9% de los republicanos es del mismo parecer.
Pese a estas circunstancias, en general únicamente el 19% de los gringos creen que la marca Trump es “fuerte”, pero el 26% la tilda como una marca, por obvias razones, “política”.
El “piquito de oro” de Trump, que nunca se muerde la lengua (o sus dedos para escribir) para el deleite de los usuarios en la red social Twitter, se deja notar no sólo en su propia marca sino también en otras marcas (pero sólo de manera muy bajo perfil).
Cuando Trump emite algún comunicado (que no sea suyo ni de su entorno familiar), el 22% de los estadounidenses se encuentra con una menor predisposición a comprar productos de su marca.
