Luis Benshimol resalta en su portal www.benshimolarte.com/  la trayectoria de Carlos Poveda, un artista autodidacta descubierto en 1961 por un grupo de 8 pintores y escultores costarricenses que tocaron su puerta y le dieron la oportunidad de presentar su obra en una exposición que organizaron en Washington titulada Arte de Costa Rica. “Ellos me proyectaron a partir de entonces me llegaron invitaciones a distintas muestras en América Latina”.

Poveda nació en San José (Costa Rica) en 1940 y se define como un artista venezolano.

Sus primeros trabajos, recuerda Benshimol, fueron reconocidos como figurativos-expresionistas. Sin embargo, luego pasa  por las figuras humanas y trabajos paisajísticos hasta plantear temas simples como los horizontes a través de superficies textualizadas.

En los años ochenta incursiona en el tema de la vegetación con toda suerte de materiales y en los noventa realiza una obra singular con el tema único de la comida. El artista evoluciona su inquietud por la textura y realiza una síntesis en la cual coinciden los colores, las texturas y los volúmenes para realizar sus platos, los cuales no tienen la misma intención que los artistas de antigüedad, pues se tratan de presentaciones gastronómicas de procedencia inorgánica.

Luis Benshimol resalta que entre los trabajos de Poveda se encuentra Ofrenda de Alimentos, catalogados como objetos de culto. Asimismo, señala que luego de experimentos con los platos y bandejas como soportes de sus obras, retoma el tema de las figuras humanas, pero esta vez de una manera distinta, ya que incluye temas como los rituales y las idolatrías.

Finalmente, menciona los reconocimientos que el artista costarricense ha recibido, entre ellos, Mención Honorífica para Dibujo de la VIII Bienal de Arte de Sao Paulo, Brasil, Premio Nacional de Pintura de Costa Rica, Premio Nacional de Escultura de Costa Rica y Premio Único Francisco Narváez de la VIII Bienal de Escultura Francisco Narváez en Venezuela.