Tras un ajustado partido ante Suiza en octavos de final, la selección albiceleste pudo resolver las complicaciones con una asistencia de Messi y un remate al arco de Di María en la prórroga, que le dio a la selección sudamericana el pase a cuartos de final, fase mundialista en la que debían dejar atrás una maldición que venían arrastrando desde hace cinco mundiales atrás: superar la prueba para poder colarse en semifinales.
Durante los primeros treinta minutos ante Bélgica, Di María, una de las figuras del Real Madrid, comenzó a presentar problemas en su muslo derecho y pidió cambio. En el banquillo se le aplicó hielo en la zona lesionada y al día de hoy se sabe que el delantero argentino tiene un desgarro muscular que lo obligará a permanecer fuera de Brasil 2014 hasta el final de la jornada.
Higuaín consiguió darle la ventaja a Argentina ante Bélgica, devolviéndole a la albiceleste el sueño de disputar una semifinal mundialista tras cinco mundiales de espera. La selección comandada por Messi se ha caracterizado por un juego bastante tímido y por vencer cada encuentro por la mínima anotación, muchos expertos aseguran que la ausencia de Di María sobre el campo puede acarrearle problemas a los sudamericanos, que se enfrentarán en semifinales a Holanda.